한국국제교류재단

El consumismo ético es una de las claves para alcanzar la neutralidad de carbono. En su libro de 2002, Cradle to Cradle: Remaking the Way We Make Things , el arquitecto estadounidense William McDonough y el químico alemán Michael Braungart destacaron la importancia del reciclaje creativo (upcycling ) y promovieron la noción de aplicar la circulación del ecosistema al diseño de productos para abordar el problema de los residuos industriales. Un aspecto esencial de su propuesta es optar por un sistema que permita reusar materiales útiles que aún no han llegado al final de su ciclo de vida para crear nuevos productos.

Para reducir el consumo de recursos, es esencial que los consumidores también contemplen consideraciones éticas y presten especial atención a marcas como JUST PROJECT.

Cubos fabricados con plásticos 100% reciclados. La ranura central sirve para sujetar tarjetas de visita, fotografías o varitas de incienso.
© JUST PROJECT

“Reducir, reutilizar, reciclar” o las tres R, es una de las máximas del consumismo ético. En la búsqueda de la neutralidad de carbono y la circulación efectiva de recursos es crucial aplicar este principio de forma activa y continuada. En los últimos años algunos agregan una cuarta R, que permita “replantar” (árboles), “rechazar” (pajitas y bolsas de plástico) o “repensar”.

JUST PROJECT es una empresa y marca de diseño con doce años de antigüedad que transmite constantemente un mensaje de sostenibilidad. Su principal tarea consiste en recolectar basura y reusarla para crear algo útil. También planifica y realiza exposiciones, talleres y otros programas sobre reciclaje creativo (upcycling ), además de publicar una revista que explora ecosistemas propicios para la circulación de recursos.

Uno de los motivos por los que JUST PROJECT llama la atención es la gestión de su CEO, Yi Young-yeun. Yi no considera a JUST PROJECT un movimiento ambientalista, sino una marca de diseño que inspira a las personas a repensar sus estándares de consumo, al ofrecer productos que realmente puedan necesitar. En vez de perseguir una causa grandiosa que salve el planeta, JUST PROJECT da sentido al trabajo que sus empleados desean hacer, al tiempo de crear cosas que la gente desea tener. Como su nombre indica, JUST PROJECT “solo” quiere dedicarse a hacer cosas.

La revista trimestral Trash, de JUST PROJECT, presenta las historias y el trabajo de aquellos interesados en recolectar o investigar sobre la basura. Cada portada es única pues se hacen con folletos desechados u otros materiales impresos.
© JUST PROJECT

Es interesante observar cómo JUST PROJECT recicla y transforma residuos en productos. Alfombras, bolsos, carteras y bolsas nuevas reciben nombres que indican su uso previo, como “Yo era una camiseta”, “Yo era una etiqueta”, “Yo era papel de aluminio” o “Yo era una pajita”. Hasta los paquetes de patatas fritas encuentran un nuevo uso. Aunque estén hechos de una película multilaminar con plástico y sean difíciles de reciclar, JUST PROJECT los valora por ser un material duradero y resistente a la humedad. Una vez se desprende el papel de aluminio y se limpia la grasa, pueden servir para crear bolsas de diferentes tamaños. Los productos terminados varían en estilo, según el tipo de paquete de patatas fritas utilizado, lo que convierte en una agradable experiencia para el comprador elegir sus patatas favoritas.

Las alfombras elegantes y resistentes de JUST PROJECT se fabrican cortando camisetas viejas en tiras, tejiendo las piezas en un telar manual y añadiendo un toque final al coserlas. Como solo utilizan camisetas de algodón, las alfombras terminadas pueden lavarse a máquina y, como los patrones de la tela son distintos, cada alfombra tiene un diseño único. El uso de un telar manual, que permite tejer la tela muy apretada, genera un producto hermoso y de alta calidad que desmiente sus humildes orígenes.

Las ventas no son la única clave del sólido crecimiento de JUST PROJECT durante los últimos doce años, pues también ha participado en una serie de proyectos colaborativos con otras marcas, empresas y equipos filantrópicos.

Por ejemplo, en el marco del Festival de Diseño de Seúl 2022, JUST PROJECT colaboró en una exposición de plástico con NoPlasticSunday , marca que se esfuerza por crear un sistema circular sostenible para los residuos plásticos. Como organizador de la exposición, JUST PROJECT reclutó a diseñadores industriales y de muebles coreanos y les pidió que diseñaran muebles usando plástico reciclado, en vez de los materiales que usaban normalmente, y estos crearon una gama de muebles útiles y bonitos. Sus innovadores diseños permitieron anunciar la exposición como prueba de que el reciclaje de plásticos ofrece nuevas posibilidades funcionales y estéticas, al tiempo de reducir las fuentes de contaminación ambiental.

Otra impresionante colaboración fue publicar con la ONG Team & Team International teniendo en cuenta todo su ciclo de vida. Hicieron la cubierta del diario con poliéster reciclado producido íntegramente a partir de botellas PET, y fue diseñado para ser reutilizado como bolsa. Los beneficios se destinaron a proporcionar agua potable a las personas de regiones con hambruna en África Oriental, convirtiendo el proyecto en algo aún más significativo.

PLASTICS: Recycling Is a New Normal. Exposición colaborativa de JUST PROJECT y NoPlasticSunday para el Festival de Diseño de Seúl 2022. Muestra decoraciones de hogar firmadas por diez artistas.
© JUST PROJECT

Reducir la enorme cantidad de residuos cotidianos es la clave para resolver la crisis climática. Esto proporciona una nueva perspectiva sobre los ciclos de producción y el comportamiento del consumidor. Por eso es de vital importancia lograr un consenso sobre el objetivo común de la neutralidad de carbono. Ideas y experimentos deben considerar todo el ciclo de vida de un producto, desde la planificación, el diseño y la elección del material, hasta el momento en el que se desecha. A lo largo de los años, JUST PROJECT ha seguido centrándose solo en su trabajo, mientras busca definir la naturaleza de diseños atractivos y buenos productos. Sus métodos son llamativos y comunican de forma persuasiva los conceptos de reciclaje y reciclaje creativo (upcycling). Al mismo tiempo, JUST PROJECT siempre anima a sus clientes a replantearse qué hace que un producto sea bueno.

Artist’s Lunch Box: Trash Buffet. Museo de Arte de Seúl, 2019. Permitió a los visitantes empacar una lonchera con trozos de basura recolectados por JUST PROJECT. También ofrecieron un almuerzo real con ingredientes de alta calidad pero apariencia poco atractiva.
© JUST PROJECT